Casos reales relacionados con la lingüística forense


El caso de Anabel Segura es cuanto menos curioso. Cuando desapareció (el 12 de abril de 1993) tenía 22 años. Salió a correr, y nunca volvió. La explicación es simple: fue secuestrada al salir de su domicilio, localizado en una zona residencial de La Moraleja (Madrid). Fue un caso mediático que dejó a los españoles pegados a la pantalla de la televisión durante tres años. 

El caso se resolvió cuando unos dialectólogos escucharon las numerosas llamadas que los secuestradores hacían al padre, exigiendo dinero a cambio de dejar a su hija con vida. Los expertos determinaron que ambos procedían de Toledo, al detectar en la conversaciones un modismo típico de la zona: "bolo". 



JonBenét Ramsey

El 25 de diciembre de 1996, la familia de JonBénet Ramsey denunció su desaparición y ocho horas después apareció muerta en el sótano de la casa familiar junto a una nota de rescate. El caso ganó popularidad cuando no se presentaron cargos contra ningún sospechoso, ya que se señalaba a los padres como los asesinos de la menor.

La prueba del delito que facilitó que el caso se resolviese fue la nota de recate y el análisis lingüístico de este.


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